Diferencia estado federal y autonómico
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qué es un estado federado
Un estado federado (que también puede denominarse estado, provincia, región, cantón, land, gobernación, oblast, emirato o país) es una comunidad territorial y constitucional que forma parte de una federación[1] Estos estados se diferencian de los estados plenamente soberanos en que no tienen plenos poderes soberanos, ya que éstos se han dividido entre los estados federados y el gobierno central o federal. Es importante destacar que los estados federados no tienen capacidad para actuar como entidades de derecho internacional. En su lugar, la unión federal como entidad única es el Estado soberano a efectos del derecho internacional[2] Dependiendo de la estructura constitucional de una federación concreta, un Estado federado puede tener diversos grados de jurisdicción legislativa, judicial y administrativa sobre un territorio geográfico definido y es una forma de gobierno regional.
En algunos casos, una federación se crea a partir de una unión de entidades políticas, que son territorios independientes o dependientes de otra entidad soberana (más comúnmente una potencia colonial)[A] En otros casos, los estados federados se han creado a partir de las regiones de estados previamente unitarios[B] Una vez formada una constitución federal, las normas que rigen la relación entre los poderes federales y regionales pasan a formar parte del derecho constitucional del país y no del derecho internacional.
qué es el federalismo
Un estado federado (que también puede denominarse estado, provincia, región, cantón, land, gobernación, oblast, emirato o país) es una comunidad territorial y constitucional que forma parte de una federación[1] Estos estados se diferencian de los estados plenamente soberanos en que no tienen plenos poderes soberanos, ya que éstos se han dividido entre los estados federados y el gobierno central o federal. Es importante destacar que los estados federados no tienen capacidad para actuar como entidades de derecho internacional. En su lugar, la unión federal como entidad única es el Estado soberano a efectos del derecho internacional[2] Dependiendo de la estructura constitucional de una federación concreta, un Estado federado puede tener diversos grados de jurisdicción legislativa, judicial y administrativa sobre un territorio geográfico definido y es una forma de gobierno regional.
En algunos casos, una federación se crea a partir de una unión de entidades políticas, que son territorios independientes o dependientes de otra entidad soberana (más comúnmente una potencia colonial)[A] En otros casos, los estados federados se han creado a partir de las regiones de estados previamente unitarios[B] Una vez formada una constitución federal, las normas que rigen la relación entre los poderes federales y regionales pasan a formar parte del derecho constitucional del país y no del derecho internacional.
diferencia entre el federalismo alemán y el estadounidense
El federalismo es un modo de gobierno mixto o compuesto que combina un gobierno general (el gobierno central o “federal”) con gobiernos regionales (gobiernos provinciales, estatales, cantonales, territoriales u otras subunidades) en un único sistema político, dividiendo los poderes entre ambos. Tiene sus raíces en la antigua Europa.[1] El federalismo en la era moderna se adoptó por primera vez en las uniones de estados durante la Antigua Confederación Suiza, la República Holandesa y los Estados Unidos de América.[2][se necesita una cita completa].
El federalismo se diferencia del confederalismo, en el que el nivel general de gobierno está subordinado al nivel regional, y de la desconcentración dentro de un estado unitario, en el que el nivel regional de gobierno está subordinado al nivel general.[3] Representa la forma central en el camino de la integración o separación regional, limitada en el lado menos integrado por el confederalismo y en el lado más integrado por la desconcentración dentro de un estado unitario.[4][5]
Los términos “federalismo” y “confederalismo” comparten una raíz en la palabra latina foedus, que significa “tratado, pacto o convenio”. Su significado inicial común hasta finales del siglo XVIII era una simple liga o relación intergubernamental entre estados soberanos basada en un tratado. Por tanto, inicialmente eran sinónimos. Fue en este sentido que James Madison, en el Federalista 39, se refirió a la nueva Constitución de los EE.UU. como “ni una Constitución nacional ni una Constitución federal, sino una composición de ambas” (es decir, que no constituía ni un único gran Estado unitario ni una liga/confederación entre varios Estados pequeños, sino un híbrido de ambos) [8]. [8] En el transcurso del siglo XIX en Estados Unidos, el significado de federalismo llegaría a cambiar, fortaleciéndose para referirse únicamente a la novedosa forma política compuesta establecida en la Convención de Filadelfia, mientras que el significado de confederalismo se mantendría en una liga de estados[9].
estado federal frente a estado unitario
El término “federalismo” deriva de la palabra latina “foedus”, que puede traducirse como “alianza” y “contrato”. El federalismo significa, pues, la creación de un Estado federal y la actuación conjunta dentro de dicha estructura. Esto puede ocurrir a través de una alianza (estado federal), o la unión de varios estados (estados miembros individuales) para formar un estado nacional (federación) donde los estados miembros individuales siguen manteniendo la calidad de estados, al menos hasta cierto punto.
En 1949, el Consejo Parlamentario se decantó por el principio federativo como base de la organización del Estado. Había una razón clara para esta elección: además de la clásica división de poderes entre el legislativo, el ejecutivo y el judicial (división horizontal del poder), el federalismo implica también otra división del poder político entre la federación y los estados federados (división vertical). Esta doble división del poder actúa como un medio eficaz para evitar cualquier abuso de poder.
En una federación, la clásica división horizontal de los poderes del Estado (legislativo – ejecutivo – judicial) se complementa con una división vertical del poder entre el Estado en su conjunto y los distintos Estados miembros. La distribución del poder garantiza la existencia de controles y equilibrios, lo que contribuye a evitar los abusos de poder.